Niños en la Cama

¡Qué rico es acostarse con tus bebés, verlos dormir, amanecer con ellos y sonreírles con unos “buenos días”!

Nadie contradice que pueda ser una experiencia enriquecedora. Pero, lamentablemente, es sumamente peligroso el hecho de que esto ocurra diariamente.

Les menciono algunos de los peligros de tener a los niños en la cama durante la noche:

Haces a tus hijos seres dependientes y miedosos. ¿Eso quieres para ellos? Te alejas de tu pareja en términos de intimidad erótica y emocional, por lo que empiezan a ser unos desconocidos en este campo. Esta distancia muchas veces termina en separación. En caso de que no te alejes de lo erótico, podrías estar erotizando a tus hijos, quienes aún dormidos, pudieran percibir el encuentro erótico. Erotizar a tus hijos cuando no les corresponde estarlo, puede traer consecuencias difíciles de afrontar en un futuro no muy lejano. Ellos no están preparados para entender lo que es el sexo. Les generas un concepto de pareja errado, pues ellos piensan que lo normal en una pareja es no dormir solos, sino que lo normal es tener a los hijos de por medio. ¿Suficientes razones para sacarlos de la cama?

Ahora bien, los ayudo con algunos tips para hacer de la “salida del cuarto de los papás” algo divertido y lejano a lo traumático:

Decreten un día cercano en el calendario como “el día de los niños grandes”. Cuéntenles sobre ese día con emoción. En ese momento se celebrará el día en que los niños pasan de ser niños pequeños a ser niños grandes. Preparen una celebración con amigos y primos. Entreguen invitaciones para ese día. Preparen la habitación en donde ellos escojan los colores de la habitación y la arreglen a su manera. El día de la fiesta, celebrarán dentro de la habitación y se tomarán fotos para el recuerdo. Esa noche, lo que pasará es que ellos dormirán en su renovada habitación de niños grandes. Hablen siempre con mucho entusiasmo, como si se tratase de un gran paso lleno de orgullo y gratificaciones. Nunca retrocedan… los niños grandes no duermen con papá y mamá. Si lo permiten una vez, ellos lo entenderán como que podrán lograrlo siempre que ellos quieran. Si requieren de algún apoyo adicional, no duden en pedir asesoría con algún psicólogo.